
Tu alimentación diaria puede ser tu mejor aliada contra los problemas vasculares.
La dieta DASH no solo ayuda a bajar la presión arterial: también reduce el riesgo de aterosclerosis, una inflamación silenciosa que daña tus arterias y puede llevar a infartos o ACV.
Lo más poderoso: no se trata de una moda ni de suplementos, sino de comida real, constancia y buenos hábitos.
Efecto natriurético
Elimina sodio por la orina
Menos sodio = Menos volumen de sangre y presión más baja.
Aumento del óxido nítrico
Favorece la apertura de vasos y mejora la circulación.
Más nitrito = Más vasodilatación
Regulación genética
Modula el sistema renina-angiotensina A través de receptores beta-2, mejora el control de la presión.
Más fibra, menos inflamación
La fibra reduce inflamación y mejora salud metabólica. Un intestino saludable también regula tu presión.
Comer DASH no solo baja tu presión, también protege tu corazón, tus riñones y tu metabolismo.